El Restaurante Pecado, ubicado en un antiguo almacén de esparto a orillas de la playa, es una verdadera perdición. Sus deliciosos platos y la exquisita decoración del local, harán que caigas en la tentación de volver.
Gracias a la buena materia prima de sus ingredientes, realmente es un pecado visitar Águilas y no comer en este sorprendente restaurante.